jueves, 9 de octubre de 2008

Una sociedad que aprende a educarse sobre la vejez

Una buena salud mental equilibrada ayuda a mantener el ritmo de vida adecuado que nos ayudara a llevar una salud que implica el buen estado físico como un buen estado de ánimo, ejercicios y una elaboración planificada de conocimientos como los de poder amar la vida.

Nos remontamos a épocas milenarias donde por ejemplo en China la edad era símbolo de productividad. El anciano no era aquel ser arrinconado que solo se recurría a el para un consejo de sabiduría, esa es la palabra, sabiduría que nos enseña por la practica y porque la edad así nos lo indica, hoy en día las empresas con las visiones globalización y con mentes mas ‘jovenes’ con miras a nuevos mundos tanto en comunicaciones y tecnología dejan de lado lo primordial que es el valor humano que con los términos modernos se les ve mas por el capital humano.

La doctora francesa Marie de Hennezel ha publicado este año "El calor del corazón impide que nos oxidemos. Envejecer sin ser viejo" (La chaleur du coeur empêche nos corps de rouillir. Viellir sans être vieux), en el cual señala: "Una vitalidad, un dinamismo, una energía del corazón son las claves de la juventud interior. Si usted no se prepara, si no activa sus recursos interiores para vivir las últimas etapas de la vida, entonces corre el riesgo de convertir su vida en un infierno". Es perfectamente posible y saludable reinventar la vida después de los 50 años, incluso con nuevas miras aun trabajando en la misma empresa o en la misma actividad o creando una nueva.

Los ejercicios mas recomendable para poder tener un buen estado emocional y físico que nos ayudara en nuestro correcto funcionamiento del organismo y mantener el ritmo cardiaco es el de caminar y la natación, El doctor Víctor Carcelén, presidente de la Sociedad de Gerontología y Geriatría del Perú, estima que la natación es adecuada para tratar diferentes patologías que se presentan en la tercera edad. Es un gran ejercicio respiratorio para enfrentar problemas agudos que también se presentan en la tercera edad, como asma y bronquitis crónica, refiere el galeno.
Otra alternativa que ayuda al buen mantenimiento del cuerpo y alma es el tai chi. El tai chi se puede calificar como las secuencias de movimientos suaves, lentos, firmes y armoniosos que transmiten una sensación de serenidad y favorecen el equilibrio entre cuerpo, mente y espíritu, algo muy importante si se trata de personas de la tercera edad que permanentemente están en busca de motivos revitalizadores. El gerontólogo social José Villalobos, director ejecutivo del grupo Vigencia, expresa que en la cultura del envejecimiento que se busca inculcar en la sociedad, el tai chi debe ser anexado a las agendas de todas las organizaciones que trabajan a favor del adulto mayor. "No importa si parte del cuerpo está inoperante. Lo que vale es moverse con armonía", indica.

1 comentario:

Unknown dijo...

Agradezco la publicación de este artículo...

Lic. josé Villalobos

www.grupovigencia.org